sábado, 23 de febrero de 2013

SIGUR RÓS en Barcelona, Sant Jordi Club. 16 febrero 2013

Primero el ruido, después la primera nota, y seguidamente el éxtasis hasta el final. Para dejarnos llevar fuera de nuestro cuerpo y levitar.

Empieza el concierto, cierras los ojos y te dejas llevar y… apareces en otro lugar ¿Un cuento de Hadas iluminado por auroras boreales?

Sigur Rós salpica su trayectoria con lágrimas que brotan del dolor, la fragilidad y, también la alegría, ornamentadas en una escala épica. Captan emociones y explosionan infinidad de sentimientos incapaces para el resto de bandas mortales, por sus envolventes sonidos únicos y por llevar su música un paso más allá donde nunca creeríamos poder llegar.

Las canciones son amplias, sin prisas, sin pausas, e intensas y tienen un significado distinto para el que se introduce en ellas, aportando un sentido distinto dependiendo del momento. Crean una atmósfera rara y misteriosamente tranquila. La música de Sigur Rós –híbrido de post rock celestial con corazón, sin etiquetas y sin igual- está llena de profundidad, resonancia y humanidad, convirtiéndose en la banda sonora de un paisaje real o imaginario.

Los islandeses son un grupo que te revienta la cabeza y desgarra las entrañas –fue descubrirlos en el 98 y cambiarme la vida- Qué más da si no entiendes lo que dicen, simplemente te hipnotizan y te transforman, con su catarsis de emociones místicas, contemplativas y espirituales. Sigur Rós se convierte en una devoción. Sus seguidores lo vivimos a plena intensidad: somos fanáticos extremados.

Su música es descrita como fríos cantos de ballena, pero Jónsi –su voz- luce traje del nuevo Emperador y embelesa a todo Dios. ¿Frío? ¡No! No existe música que produzca tan absoluta excitación. Vaivén continúo de la calma a la distorsión.

El concierto –sublime, sensible, solemne, fastuoso, soberbio, majestuoso, mágico- te deja noqueado desde sus tres ejes: visual, musical y personal. Proyecciones a tiempo real, la espectral voz, su muro de sonidos derivados de pesadas guitarras que se atraen y se aparean, las caricias de un arco de violín sobre sus cuerdas haciendo el amor, la contundente batería –violenta si es necesario-, el bajo omnipresente y fundamental, tocado –en ocasiones- con baqueta, la sección de violines y vientos en segundo plano que cobra vida propia y una infinidad de pequeños detalles que te sacuden y te llevan por una montaña rusa emocional. ¿Cómo unas personas aparentemente tranquilas en el escenario desatan una música enfurecida bajo una capa de melancolía que te lleva al éxtasis?

Mi primera vez en el Sónar del 2001 te invitaban a sentarte y tumbarte en el suelo, en 2012 los escenarios impresionaban antes de la actuación: Castello Scaligero de Villafranca di Verona –el mejor concierto de mi vida- y el Théâtre Antique de Arles (Francia). Y llegamos al Sant Jordi Club en Barcelona con mucho temor por el sonido del lugar –temor infundado- y ¡sorpresa! el primer cambio –genuino de sus lives- apareció por fin en mis próximos recuerdos, la famosa cortinilla translúcida que proyecta imágenes distorsionadas y gigantes de la banda, para caer al finalizar su tercer tema y descubrirse una enorme pantalla curva panorámica con deslumbrantes imágenes recogidas de sus grandes vídeos que te invitaban a permanecer con los ojos muy abiertos y convertir este concierto en una experiencia inolvidable. “La Rosa de la Victoria” triunfó con su estupendo espectáculo épico dejándonos boquiabiertos, hipnotizados y con la sensación real de que su directo es imposible de mejorar en la actualidad.

SET LIST: [1h. 45 min.] 15 píldoras emocionales y curativas 

1. ‘Yfirbor∂‘, texturas electrónicas en este nuevo tema muy de “( )” reposado y con una gran sección de viento 
2. ‘Vaka‘, «Untitled #1» con las imágenes de su vídeo que reflejan un futuro utópico en el que unos niños con máscaras de gas juegan con nieve negra bajo un cielo rojo, fue la primera sacudida sensorial, suena la primera nota y ya has volado, has despegado a otra esfera del Universo 
3. ‘Ný batterí‘, sin tiempo para reponerte uno de sus grandes hits que te deja sin palabras. 
4. ‘Hrafntinna‘, nuevo tema, muy trance, metálico y con una estructura repetitiva 
5. ‘Sæglópur ‘, Perdido en el mar la canción del xilófono, y del niño ahogado en uno de sus mejores vídeos y una de sus grandes canciones, con un piano sencillo y un glockenspiel (instrumento de percusión que consiste en una serie de láminas metálicas afinadas en escala cromática y montadas en dos columnas) emulando gotas de lluvia y llevando el tema hacia la explosión emocional, sobrevolando un ambiente noise y las cuerdas que le suman más intensidad aún a la voz de Jónsi Birgisson con un crescendo épico y tremendamente emocional. 
6. ‘Olsen Olsen‘, la sorpresa de la noche –la canción de la flauta-, por inesperada 
7. ‘Fljótavík‘, única canción de ‘Með sum í eyrum við spílum endalaust’, preciosa, una de mis debilidades entrando a cuchillo en el corazón 
8. ‘e-bow‘, descarga sónica para levitar con protagonismo de una batería pesada imponiendo el ritmo, y con un espectacular visual de montañas descendiendo que hacía que Sigur Rós pareciera subir a los altares del Olimpo. 
9. ‘Varu∂‘, el único tema de “Valtari”, estremecedora, majestuosa por la explosiva emoción y sensibilidad híper sostenida que contiene 
10. ‘Hoppípolla‘, [+ ‘Með blóðnasir‘], “Saltando en charcos” la canción de la felicidad con un chispeante juego de luces que se ha convertido en el clásico entre los clásicos. - "Sonriendo, dando vueltas en círculos, cogidos de la mano. El mundo entero se ve borroso pero tú sigues ahí empapado, completamente mojado, sin botas de goma"- [Fragmento traducido de Hoppípolla]. 
11. ‘Glósóli‘, “Sol resplandeciente”, pop orquestal simple y efectivo, épico, sobresaliente, como si mezcláramos a Enya con My Bloody Valentine y el desfile del ejército ruso por la Plaza Roja, con un final avasallador a través de la batería, acompañado del vídeo oficial con los niños lanzándose por un acantilado, y consiguiendo que brotaran mis primeras lágrimas descontroladas. 
12. ‘Kveikur‘, el mejor tema de los nuevos, muy Depeche Mode de su época oscura, y con un Jónsi algo más áspero y agresivo. 

13. ‘Svefn-g-englar‘, el primer bis y una de sus cimas –la llamo la canción del periscopio-, una auténtica obra maestra en el que el falsete de Jónsi toma vida propia transformándose en un ángel que te hipnotiza, entras en otra dimensión -distinta a la tuya habitual y diaria-, en una dónde no hay pensamientos ni razonamientos, sólo intangibles no reales, no medibles, se te encoge el alma, te aparecen los escalofríos, se sobrecoge el corazón, y hay una fuerza nerviosa que sale de dentro del estómago que como un resorte te dibuja una sonrisa mientras afloran tus lágrimas 
14. ‘Brennisteinn‘, la más industrial de las nuevas, y la primera que estrenaron, violenta, ruda e irresistible, con sus cuerdas y sus líneas de bajo en tonos más graves. 
15. ‘Popplagi∂‘, “The pop song” apoteosis de tensión en progresión con una parte final llena de furia sobrecogedora y un animal desatado llamado Jónsi. Después de estos 15 minutos no puedes caminar, estás inmóvil, tu alma ha abandonado a tu cuerpo, que ahora está ahí inerte –por suerte es pasajero-. Y al que no le haya ocurrido nada, tiene un grave problema de oído y especialmente de sensibilidad, de emociones, de sentimientos que si no han aparecido al escuchar esta belleza probablemente ya nunca se manifestarán.



RESUMEN: 0 de “Von”, 3 de “Ágætis Byrjun”, 3 de “( )”, 4 de “Takk…”, 1 de “Með suð í eyrum við spilum endalaust”, 1 de “Valtari” y 4 TEMAS NUEVOS. MEJORES MOMENTOS: 1. ‘Popplagi∂‘, 2. ‘Svefn-g-englar‘, 3. ‘Glósóli‘, y ‘E-bow‘

PREGUNTA: ¿Por qué todos sus conciertos –Villafranca di Verona, Arles, Sant Jordi Club- duran 1 hora y 45 minutos? No hay nada fruto de la improvisación, pareciendo una obra teatral en la que todos sus componentes, 11 músicos, funcionan como un ente único, milimétrico, en la misma dirección: EL VIAJE A TU FELICIDAD.

Es de agradecer que salieran hasta en dos ocasiones para recoger ese estado feliz de los casi 5.000 presentes (entradas agotadas). 

PUNTUACIÓN: Un 10 apasionante. 

* P.D. Ah, su teclista Kjartan Sveinsson ha sido una gran pérdida para Sigur Rós, pero ha sido más enorme la pérdida que supondrá para él no pertenecer a una banda que sigue haciendo historia. Jónsi, Georg y Orri en los Altares de la Música, de la Cultura,... SIGUR RÓS: PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD.







4 comentarios:

  1. Bravo!!! Sentí lo mismo, en la maravillosa y afortunada primera fila.

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    1. Eres un privilegiado. En Villafranca di Verona estaba muy cerca del escenario y es como más se disfrutan. GENIALES de verdad. Te invito a entrar en la página de Sigur Rós de facebook y pocer compartir tus comentarios, enlaces, fotos...
      Gracias.
      https://www.facebook.com/juanAthletic?fref=ts

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  2. Enric NoHiés Demoment:
    Te debo decir algo importante: Impresionante crítica, me gusta lo que dices pero más aún el cómo lo dices. Me quito el sombrero. Y me fustigo con unos cuantos latigazos por no ir. Genial el enlace del vídeo que pone los pelos de punta y te sobrecoge.

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    1. Very thanks Enric, un lujo que un gran periodista me dedique estas palabras.

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